La traducción nos ayuda a trasmitir el mensaje a la lengua meta. Encontramos diversas herramientas, entre ellas, la adaptación, el tema que vamos a tratar hoy.
La TRADUCCIÓN y adaptación del lenguaje consiste principalmente en extraer el mensaje del texto de partida y adaptarlo al idioma de destino. No se trata de realizar una traducción exacta en la lengua meta correspondiente que se aproxime lo máximo posible al texto de partida. Más bien al contrario, pues se crea un texto completamente nuevo y se evita en todo momento la literalidad.
Lo que se mantiene es la sensación que provoca el texto original en los lectores. Se traslada a la lengua meta y se reproduce el sentido, de forma que el texto en el idioma extranjero cause la misma sensación en sus clientes internacionales. Puede ser muy útil, ya que ayuda a que el lector entienda el mensaje de una forma más clara.
Sí comparamos la traducción con la adaptación, encontramos dos formas de hacer llegar el mensaje. La diferencia fundamental está en la literalidad. ¿Hasta qué punto debemos ser fieles al texto original?
En muchos casos no podemos traducir sin tener que realizar una adaptación, ya que una traducción más “literal” del mensaje haría que perdiera parte o todo su sentido al llegar a nuestro receptor. Debemos saber cuándo adaptar un mensaje y cuándo una expresión puede tener un equivalente más apropiado para una situación determinada.
Esto se aplicaría por ejemplo a la traducción de martes 13 (conocido en algunos países como el día de la mala suerte). Al adaptarlo a la cultura meta, en este caso, a la inglesa, sería Friday 13th (viernes 13), evitando Tuesday 13th que sería la traducción literal, por lo que se lograría así, la adaptación cultural. Este tipo de equivalencias también las encontramos en películas o series de televisión, donde se adapta una conversación o referencia cultural a la cultura de la audiencia extranjera.
En la serie de televisión Sabrina, cosas de brujas podemos apreciar otro ejemplo de adaptación, cuando en repetidas ocasiones, Salem, el gato de Sabrina canta Soy Minero de Antonio Molina. La persona que se encargó de esa traducción eligió esta canción como equivalente a la canción inglesa original, un villancico que no hubiera surgido el mismo efecto en España.
No confundamos la adaptación con la localización. Con esta última nos referimos al desarrollo de una página web, un programa o un videojuego que se lanza en otro país con un idioma diferente. Localizar un producto o servicio implica realizar modificaciones o adaptaciones en el original para que se pueda comercializar en el mercado al que se pretende llegar. Los contenidos como el texto y las imágenes deben adaptarse al público destinatario o, por ejemplo, cuando hay que traducir aspectos jurídicos con leyes de cada país.
Hoy en día, con la globalización, nos enfrentamos constantemente a referentes culturales y es por eso que la traducción juega un papel muy importante para obtener una mejor comunicación del mensaje, la adaptación o la localización forman parte del proceso de la traducción.
Esto también nos hace ver lo importante que es conocer las diferencias culturales entre distintos países.
En CBlingua somos expertos en la traducción especializada y en la adaptación del lenguaje y a la cultura de la audiencia extranjera.