Hoy, 8 de marzo de 2019, el brexit cada vez más cerca. Estamos a 21 días de que se cumpla la fecha límite que establece el Artículo 50 del Tratado de Lisboa para que Reino Unido salga de la Unión Europea con o sin acuerdo. Tras la pasada votación de enero, catastrófica para el gobierno de Theresa May, sigue sin haber respuestas a esas preguntas que surgieron al comienzo del proceso y que han permanecido durante el mismo.
La incertidumbre crece en estos días. Se acerca ese 29 de marzo en el que Reino Unido tendrá que abandonar definitivamente la Unión Europea. Y sobre todo porque Theresa May no consigue convencer a su parlamento de que el acuerdo que existe es la mejor opción.
Se comenta que la mayoría de los diputados británicos votaron en contra de ese acuerdo por el asunto de la frontera entre la República de Irlanda, miembro de la Unión Europea, e Irlanda del Norte, territorio de Reino Unido.
Tanto Reino Unido como la Unión Europea coinciden en evitar una frontera entre estos dos territorios y acordaron el llamado backstop, es decir, pasado el periodo de transición del que hablamos en el artículo anterior, Irlanda del norte se mantendrá dentro de la unión aduanera y el mercado único mientras que Reino Unido los abandona. Muchos diputados creen que esto sería como si parte de Reino Unido siguiera perteneciendo a la Unión Europea.
¿Qué pasará ahora con el brexit cada vez más cerca?
Este mes es crucial para el Brexit. En los próximos días se llevarán a cabo diferentes votaciones que intentarán aclarar de una vez por todas este asunto.
El próximo martes 12 de marzo, el parlamento británico votará un acuerdo mejorado del brexit.
Si esta votación resulta en un “no”. El miércoles 13 de marzo se llevará a cabo una nueva votación para decidir si Reino Unido abandona la Unión Europea sin acuerdo. Es decir, seguir adelante con el “brexit duro”. Si de nuevo esta votación resulta en negativa, el 14 de marzo será el último día que tenga el parlamento británico para solicitar una prórroga a la Unión Europea.
Para que se apruebe, todos los países de la Unión Europea tendrán que votar “sí” a esta prórroga. Si es así, será breve para no alcanzar la toma de posesión de los nuevos diputados parlamentarios que se eligen en las próximas elecciones europeas de mayo.
¿Qué consecuencias tendrá todo esto?
Las consecuencias más directas y claras dependen de lo que ocurra en unos días.
Si la votación del nuevo acuerdo tiene éxito, Reino Unido saldrá de la Unión Europea. Entonces se pondrán en marcha las medidas que recoge ese acuerdo mejorado.
Si por el contrario, se vota que “no” y se decide salir de la Unión Europea sin acuerdo, se llevará a cabo el temido “brexit duro” con todo lo eso que conlleva. Sin embargo, si se decantan por la prórroga, no sabemos qué sucederá hasta pasados unos meses.
Independientemente de lo que ocurra en los próximos días, diferentes ámbitos se verán afectados. Entre ellos, el económico, donde la libra ya ha sufrido cambios debido al largo y tedioso proceso.
Por supuesto, los ciudadanos tanto europeos como británicos serán los más afectados. Esta salida, inminente o no, tendrá consecuencias para ellos que se verán reflejadas de distintas formas. En el trabajo, en el lugar donde decidan vivir, en las pensiones, ayudas, etc.
Nuestro ámbito, la traducción, también se verá afectada con el brexit cada vez más cerca. De hecho, ya se están notando los cambios. El volumen de trabajo aumentará probablemente debido a la necesidad de la traducción jurada de documentos personales y de nuevos acuerdos que se establezcan entre Reino Unido y los países de la Unión Europea.
No podemos saber con exactitud qué pasará a largo plazo. Ni cuáles serán las consecuencias exactas una vez finalicen las votaciones de los próximos días. Con el brexit cada vez más cerca, podemos hacernos una idea de los posibles cambios y consecuencias. Pero seguimos con la incertidumbre que caracteriza al brexit desde el principio. De lo que sí podemos estar seguros es de que estamos ante un proceso de cambio sin precedentes que afectará a distintos aspectos de nuestra vida seamos o no británicos.